Es una técnica que consiste en aplicar microinyecciones en el cuero cabelludo con la finalidad de estimularlo y hacer crecer el cabello.
Con esta técnica se consigue mejorar el folículo piloso disminuyendo la caída de cabello y reparando los tejidos dañados.
Con la aplicación de estas microinyecciones se introduce en el cuero cabelludo plasma enriquecido para lograr los resultados esperados. El plasma se consigue del propio paciente con la extracción previa de sangre. El plasma rico en plaquetas llega al folículo activando la circulación sanguínea y estimulando el pelo desde la raíz. Con esta técnica se consiguen resultados más rápidos de regeneración y crecimiento capilar.
Este tratamiento está indicado para personas con una caída de leve a moderada de cabello. En el caso de pérdida total o irreversible, la solución más idónea es el injerto o trasplante capilar para recuperar de forma definitiva el cabello perdido.
Para potenciar los resultados de la bioestimulación capilar algunas clínicas utilizan el láser para acelerar el procedimiento. El láser ayuda a estimular el folículo piloso haciendo que el plasma enriquecido llegue más rápido.
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